Visita al CRA del Liceo Juana Ross

Este fin de semana, tuve la maravillosa oportunidad de asistir al colegio que me vió nacer como docente y en donde pude aprender de gente maravillosa entre las cuales encontramos a Johanna Cuadra, Psicopedagoga amante de la lectura; Andrea Rosales, Psicopedagoga experta en Desarrollo Cognitivo; Ariella Vargas, Parvularia de gran corazón que siempre está dispuesta a entregar ese, tan necesario, "Buen consejo" en los momentos de profundo estrés y, quien ha sido mi gran mentora, Marianela Orrego Profesora Básica, mi ex paralela y destacada coordinadora del CRA del Liceo Juana Ross de Edwards de Valparaíso (Perteneciente a la Comunidad de religiosas de Santa Marta).

Fue un fin de semana realmente enriquecedor, en donde nuestras colegas dieron a conocer de forma humilde y generosa, aquellas prácticas pedagógicas exitosas que, en cierta forma, les han permitido alcanzar los logros que hoy les son reconocidos.

Este encuentro ha calado profundo en mi corazón, primero por encontrarme con estas queridas amigas, por otra parte pude abrazar a los pequeños y pequeñas que pasaron por mi aula y que hoy se han transformado en hermosas señoritas y atentos caballeros... Verlos, ha sido emocionante, puesto que he retrocedido en el tiempo y he podido recordar el espíritu que antes tenía y que es tan necesario mantener al educar: La motivación, la alegría, el corazón y la humildad para crecer cada día y dejar huellas en todos quienes tocamos a nuestro paso.

Los años pasan y nos vamos poniendo viejos... Perdemos en el trayecto un poco de esta chispa inicial.  La frustración comienza a disolver nuestra motivación e iniciativa y así, sin darnos cuenta, sucumbimos ante la fatal pregunta "¿Qué sacamos con hacerlo...? ¿Para qué esforzarnos tanto...?"  Hoy he recordado la respuesta a esa gran pregunta: "Lo hacemos porque nuestras niñas y niños nos necesitan, lo hacemos porque Educar es nuestra misión divina y por sobre todo, Educar es creer que es posible un futuro mejor".

Desde hoy el desgano y el temor no tendrán lugar en nuestro corazón, trabajamos para nuestras niñas y entregamos lo mejor de nosotras en cada acción para sembrar semilla en ellas...  Los frutos a veces tardan, pero la paciencia también es un don divino necesario de cultivar.

Por ello, con energías renovadas, queremos compartir una gran noticia con nuestras seguidoras y seguidores: "Pronto en este mismo blog, verán grandes novedades y actividades cuyo fin es el mismo de siempre... Leer para soñar, leer para pensar, leer para crear"